Benicàssim y los carmelitas del Desert de les Palmes (1ª Parte)

Benicàssim y los carmelitas del Desert de les Palmes (1ª Parte)

Cuando deambulamos por los espacios serenos del Desert de les Palmes, a escasa distancia de Benicàssim, no podemos dejar de advertir lo opuesto a nuestra actual forma de vida de aquella que presidió el lugar durante largos siglos: un modo contemplativo, alejado del gusto actual por lo inmediato, y que todavía ilustra de manera espectacular las ruinas del que fue monasterio de la orden de los carmelitas descalzos desde el siglo XVII. Se trataba de hombres temerosos de Dios y que llegaron aquí buscando la soledad y la sencillez, una espiritualidad que parece que emana de los lugares altos y apartados, quizás por su cercanía mística al Reino de los Cielos.

2. Desert de les Palmes. Autor, Mallol

Desert de les Palmes. Autor, Mallol

Esta búsqueda explica el origen del término “Desierto”, aunque se trata más bien de un desierto en sentido figurado, es decir, la renuncia voluntaria de todo aquello que no sea indispensable. Esta actitud era parte inherente al estilo de vida de los carmelitas, un anhelo que hoy nos es difícil de entender pero que durante muchos siglos formó parte de nuestra historia espiritual y que fue conocido muy pronto con el nombre de vida eremítica.

3. Antiguo monasterio de los Carmelitas. Autor, Arjan Veen

Antiguo monasterio de los Carmelitas. Autor, Arjan Veen

Los “Desiertos” de los carmelitas descalzos se situaban siempre en parajes apartados y, por regla general, rodeados de una naturaleza agreste y espectacular. Allí donde la vegetación era pobre fue ocupación primordial de los religiosos repoblar con diversas especies para embellecer el paisaje, y hacerlo además como una más de sus ocupaciones diarias. Como es lógico, tras su llegada a este enclave los carmelitas de Benicàssim levantaron en el lugar un monasterio no muy distinto a otros muchos de la congregación: así, el 2 de febrero de 1694 se instalan en la antigua masía de Gavarrell, que enseguida comienza a adaptarse como convento y lugar de residencia definitiva.

4. Olas que hipnotizan. Autor, Oscar Alcalá

Olas que hipnotizan. Playa de Benicàssim. Autor, Oscar Alcalá

Las obras se alargaron por espacio de 12 años, aunque la iglesia no se bendijo hasta 1733. Alrededor de ésta y en diversos puntos de la finca se situaron ermitas como residencia de los religiosos, que de esta manera podían vivir de forma totalmente aislada de acuerdo con los preceptos de su orden, aunque en determinados momentos del día estuviesen obligados a celebrar ritos en común. Las grutas cercanas al complejo también fueron aprovechadas, al tiempo que se preparaban parcelas para huertas, se construía un aljibe y se plantaban árboles e hileras de cipreses en el área de acceso al monasterio.

Continuará …

5. Torreón del Castillo de Montornés. Autor, Aureliano Rex

Torreón del castillo de Montornés. Autor, Aureliano Rex